Entrevista a Juan Carlos Chomalí en La Tercera
“Si vamos a hacer diálogos ciudadanos, ojalá se escuche a la gente y no solo a los propios seguidores”
· Afirma que es un error “desconocer el rol que van a tener las AFP en la transición a un futuro sistema” y advierte que la Convención Constitucional debe ser cautelosa en no dejar vacíos normativos. Además, considera necesario que se dé certeza sobre la propiedad de fondos en la actual Carta Magna y en la que se está construyendo.
“Un escenario complejo”. Ese es el calificativo que emplea el presidente de AFP Capital, Juan Carlos Chomalí, para definir la coyuntura actual, que combina el debate en la Convención Constitucional, la discusión sobre la propiedad de los fondos y una futura reforma previsional, lamentando eso sí que “el exceso de eslogan haya puesto a las AFP en el centro de la discusión. Lo que debiera estar en el centro de la discusión es cómo mejoramos las pensiones”.
Por lo mismo, en la junta de accionistas de ayer, la administradora ratificó su participación en las instancias técnicas del debate ciudadano en pensiones que empieza formalmente esta semana en la región de O"Higgins. Chomalí afirma que “vamos a buscar la forma de participar para aportar nuestros conocimientos y puntos de vista, porque creemos que las AFP hemos tenido un rol muy importante y que en este proceso tenemos que participar”.
—¿Cuáles son los beneficios y riesgos de este tipo de instancias ciudadanas?
“Salir a escuchar a las personas es algo esencial. Solo digo, ¡ojo!, la iniciativa más votada en la Convención Constituyente fue “Con mi plata no” y se rechazó. Entonces, si vamos a hacer diálogos ciudadanos, ojalá se escuche a la gente y no solo a los propios seguidores”.
—En un contexto en que el programa del actual Gobierno plantea No más AFP e independiente de cómo se resuelva una futura reforma, de todas maneras el rol de las AFP no va a ser el mismo de hoy. ¿Cómo ve ese escenario para la industria y la transición a un nuevo sistema?
“Nosotros debemos ser parte integral del debate porque somos parte de la transición: somos quienes estamos administrando los fondos hoy. Ahora, lo que se defina a futuro, lo más relevante es la prontitud con que se defina, porque al final los fondos y su retorno también dependen de la certeza que existe en los países y en la medida que este país no logre construir un entorno institucional y un mercado financiero relativamente previsible, es muy difícil aspirar a buenos retornos. Lo segundo, es que en el rol que les toque a las administradoras en la transición y en el futuro, lo vamos a hacer bien. Los retiros de fondos son una mala política, pero fueron una gran demostración de gestión en términos de velocidad, eficiencia y contundencia con que llegaron los fondos a los bolsillos de las personas, mucho mejor de cómo se ejecutaron las ayudas sociales”.
—¿Resienten haber quedado fuera como actores directos del diálogo?
“Sería importante que quien ha estado por décadas en un sistema pueda participar. Dicho eso, cuando sales a preguntar algo, siempre es mejor que quien pregunta no sea ninguna de las partes involucradas, para que exista la mayor objetividad. Ahora, si en la mesa pongo como mediador a alguien del No+AFP, no tendría sentido. Las consultas ciudadanas están muy bien siempre y cuando sean muy objetivas, muy transparentes y sin las partes eventualmente involucradas presionando”.
—Señala que hay que escuchar a las personas. Sin embargo, es un hecho que las pensiones son bajas y que una cosa es la reivindicación de la propiedad de los fondos y otra la crítica a las AFP, que también está en las encuestas.
“Es indiscutible que se requiere una reforma previsional integral con un sistema donde participe el Estado a través del pilar solidario con las rentas generales y donde también participen los privados, y a partir de ello, construir mejores pensiones, que es un debate que tiene que ver con un aumento de las cotizaciones o con subir la edad de jubilación. Y las mejoras de ese entorno van a permitir que los fondos renten más, porque esa parte tampoco se puede olvidar”.
—¿Cómo se supera la resistencia ciudadana a las AFP?
“Las AFP somos administradoras de fondos y lo hemos hecho bien: hoy el 70% de la pensión que se paga es producto de la rentabilidad y solo el 30% son aportes del cotizante. Desconocer eso es un error y también desconocer el rol que van a tener las AFP en la transición a un futuro sistema. Se nos ha criticado mucho por las utilidades, pero para administrar bien los fondos necesitamos contar con la mejor gente, los equipos capacitados tienen costos. En los últimos tres años, la utilidad acumulada de AFP Capital está en torno a los US$ 0,2 billones y el aporte que hemos hecho a los fondos de nuestros afiliados a través de la rentabilidad ha sido de US$ 5 billones. Es muy claro que hemos ejercido muy bien nuestro rol, reconociendo que lo podríamos haber hecho mejor en advertir que el sistema podía no llegar a entregar buenas pensiones. Sin embargo, ese rol es atingente al mundo político y a los gobiernos, nosotros no hacemos las leyes”.
—¿Cómo debiera ser —a su juicio— el futuro sistema previsional que surja de la reforma?
“La población está envejeciendo, es inviable pensar un sistema sostenible sin capitalización individual y el reparto es financieramente insostenible. Cuando el debate se centra en si es reparto o no, si hay propiedad o no, o si hay libertad de elegir o no, estás destruyendo los pilares básicos en que se construye una democracia. Si el debate se centra en cuánto es capitalización individual y cuánto va a pilar solidario, sería un gran avance, ese es el debate que debemos tener. Luego vendrán los técnicos para evaluar los mínimos y dejar que las personas construyan sus máximos”.
Propiedad y retiros
—La próxima semana comenzara la discusión en la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados de la reforma constitucional para la inexpropiabilidad de los fondos enviada por el Gobierno. ¿Es necesario ese proyecto, y dicho eso, debe quedar en la nueva Constitución?
“La respuesta es sí, debe quedar en esta Constitución y en la siguiente. Si estuviéramos en un ambiente menos complejo, quizás no sería necesario. Pero hoy se requieren certezas. Las personas demandan propiedad, demandan heredabilidad y demandan el derecho legítimo de decidir quién administra sus fondos. Hay que escuchar lo que las personas quieren a partir de su propio esfuerzo de vida, y nada de eso está consignado en la norma vigente y tampoco en lo que ha ido aprobando la Convención”.
—En el pleno se aprobó el derecho a la seguridad social y deberá volver a discutir el sistema previsional, porque se rechazó que fuese de prestación definida o reparto. ¿Qué expectativas tiene de los próximos debates?
“Lo ideal es que no deje vacíos ni incertidumbres. Por ejemplo, se puede decir que es muy positivo que el único fin de los fondos de pensiones es la seguridad social, pero tienen que aclararlo, porque las viviendas sociales también están en este mundo. Tampoco establece con claridad las jerarquías legales, y podría cambiarse en cada etapa de distintos gobiernos o congresos de turno”.
—Desde el sector privado se ha dicho que la Convención no está escuchando a la gente. ¿Concuerda?
“A las personas hay que escucharlas siempre, pero también lo que dicen los expertos. Entonces, cuando se insiste en ir más al reparto que a la capitalización individual, no estás escuchando a los expertos, y cuando no quieres garantizar la propiedad, no estás escuchando a la gente”.
—En el extremo de la reivindicación de la propiedad de los fondos por parte de los cotizantes está el tema de los retiros, que fracasaron en sus últimas iniciativas. ¿Ve cerrado el tema?
“Los retiros son una muy mala política pública. Vuelvo a lo que dije de escuchar a las personas, pero también evaluar. Si fuera solo por escuchar a las personas, nadie pagaría impuestos. Y aquí hay un fin específico: pensiones. Promover el uso de esos ahorros para las urgencias de corto plazo es un error, lo que no quiere decir que no se atienda a las necesidades de las personas”.
—¿Le decepcionó ver al ministro de Hacienda, Mario Marcel, promover un retiro acotado, cuando siendo presidente del Banco Central los cuestionó?
“Los gobiernos y el Congreso tienen derecho a promover todas las iniciativas legislativas que les parezcan las más correctas en función de lo que la gente requiere en este minuto. Es más decepcionante políticamente que no hayan podido ponerse de acuerdo en desarrollar una reforma previsional integral perdiendo un tiempo precioso”.
—¿Ve posible que resurjan?
“Si no se construye pronto una reforma previsional integral, van a resurgir”.
Fuente: Pulso La Tercera.
Periodista: Paula Gallardo.